170 comunicaciones. Ni una más ni una menos, por ahora. Ese es el número de quejas que ha recibido la Defensora del espectador de RTVE, Elena Sánchez, a raíz de la emisión del reportaje sobre Jerusalén en el espacio Españoles en el mundo, emitido el pasado 7 de diciembre.
En estas quejas se acusa de mostrar una visión sesgada de la realidad de Jerusalén y de evitar los testimonios de españoles que viven en esa ciudad que simpatizan con la causa palestina. Mientras, RTVE se justifica de esta medida alegando que se su retirada es "por ofrecer una visión incompleta de Jerusalén" aunque matizan que no se ofrecía una visión "sesgada".
Desde aquí me hago una pregunta, ¿con esta medida, propia de regímenes anteriores, no han conseguido todo el efecto contrario? Seguro que son muchas las personas, me incluyo, que no vieron el espacio y que ahora si sienten la curiosidad de ver el “polémico” reportaje. Lo peor de todo, que tengamos que recurrir a terceras páginas para poder verlo mientras que en la web que pagamos todos los españoles, la url no existe.
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